El amor es la única herida que no sangra, pero la que más duele

El amor, a veces, nos gana a pulso. Moralmente. Nos puede destrozar y hacer caer a lo más bajo entre ratas y culebras, o nos puede elevar a lo más alto y rozar las núbes con magníficas vistas. El amor es uno de los conceptos básicos en la vida, aunque no todos, como personas, lo tenemos por igual. El amor puede hacerte sufrir hasta sentir que ya no existes. Hasta el extremo en que te rebienta por dentro y lo manchas todo de un color feísimo, de dolor. Puede hacerte sentir la peor persona de toda la humanidad. Puede comerte por dentro, corroerte como ácido sulfúrico, desquebrajar cada parte de ti. Puede hacerte sentir pequeña, tanto como insignificante. El amor es capaz de hacerte morir mientras sigues en vida. Tiene la fuerza suficiente como para acabar con todos tus deseos y hacerlos desaparecer, para romper tus sueños y tirar tus ilusiones y esperanzas por la borda. Es capaz de eso y mucho más. Pero tambien puede hacerte sentir una princesa viviendo en el palacio de los brazos de tu apuesto galán. El amor puede quererte tanto hasta el punto de hacerte amar a alguien hasta pensar que cuando estais juntos, sois una misma persona. Ser uno. Es capaz de regalarte los mejores momentos que jamás habías pensado vivir. Un jardín de sonrisas, un baúl que esconde mil abrazos y los besos que puedas desear. El amor puede poner en tu camino a la persona perfecta. Puede hacerte viajar con los pies en tu casa. Puede tranquilizarte con palabras bonitas en situaciones complicadas. El amor puede ser hielo que te abrase, fuego que te hiele. Un descuido que te cuida, un descanso muy cansado. Puede ser un cobarde disfrazado de valiente. Ser libre entre rejas, una enfermedad que aumenta tras ser curada. Esto es para mí el amor, el que es contrario de si mismo en todo. Puede ser todo y nada. Puede hacerte sufrir y hacerte feliz. El amor, inevitable. Irremplazable. Irresistible. Nunca tendrá definición exacta, pues cada persona lo vive en otro cuerpo. Pero siempre, el amor estará en nuestros adentros. Nos rodea. Nos cuida y nos arropa. El amor es indescriptible. Pero todos somos capaces de sentirlo.